3x18 El repartidor de pizzas

Trama: Mientras los niños de la vecindad juegan al boliche, un hombre disfrazado de pizza le da al Señor Barriga un volante donde dice que se busca empleo al instante repartiendo pizzas, y éste le pide a Don Ramón que lo consiga, pero todos oyen a Quico y creen que Don Ramón va a ser contratado para ese trabajo, sin que el Señor Barriga le diga que lo va a correr de la vecindad. Más tarde en la pizzeria Don Ramón trata de manejar una motocicleta por órdenes del encargado para repartir pizzas a domicilio siendo un buen negocio, y cuando Ñoño presiona una llave en el agujero, Don Ramón termina destruyéndola por el callejón sin salida al manejarla solamente. Luego el encargado de la pizzería le enseña a Don Ramón como preparar pizzas y él acepta el trato, pero una vez que el encargado va de compras, Don Ramón termina usando alguno de los teléfonos para el pedido de la clientela y se queja. Asi que el Chavo y sus amigos deciden ayudarlo a fabricar las pizzas de inmediato, sin que el encargado lo descubra, luego se hacen pasar por cocineros y buscan las instrucciones para la elaboración de pizzas usando algunos ingredientes. Mientras tanto Don Ramón se duerme en el gabinete, pero le pasa al Chavo una salsa picante, mientras que el Señor Barriga espera a Don Ramón por su pizza que se la estaba preparando, y cuando los niños la tienen lista, la Popis se la da al Señor Barriga, pero éste al comérsela se quema con la salsa picante y el Chavo le echa agua. Por desgracia cuando el encargado de la pizzería regresa de sus compras urgentes, amenaza a Don Ramón con causar desorden y lo obligaría a pagarle todo lo que le debe, pero obligándolo a repartir las pizzas, le dice que si se tarda más de 30 minutos en entregárselas, la pizza se le regala al cliente y Don Ramón logra pagarla inmediatamente. Asi que después de esto, intenta usar su bicicleta para repartir las pizzas a Doña Cleotilde y a Jaimito, pero éste termina comiéndoselas y los niños también, mientras que Doña Cleotilde y Jaimito amenazan a Don Ramón con quejarse con el encargado de la pizzería, y por último Doña Florinda obtiene su pizza gratis, porque Don Ramón tardó más de 30 minutos en entregársela. Al final el encargado de la pizzería culpa a Don Ramón por haber destruido su motocicleta nueva, su cocina y hasta hacer quejar a todos sus clientes por su mal servicio, y para poder hacerlo pagar todo lo que le debía, lo obliga a usar un disfraz de pizza para pedir caridad a toda la gente, pero el Señor Barriga intenta seguirlo por su promesa.